miércoles, 19 de enero de 2011

FASCINACIÓN POR LAS LETRAS



AMORES ADULTEROS
BEATRIZ RIVAS / FEDERICO TRAEGER
EDITORIAL ALFAGUARA


En estos últimos días mis ojos han ido a dar en los anuncios de las paradas de camión de la Ciudad de México, esos escaparates que ahora contribuyen para
–por lo menos-, dar un poco de luz y cierto sentido de limpieza al paisaje urbano.
Pues ahí, se encuentra en promoción una campaña que tiene que ver con el impulso a la lectura. (¡¿otra vez?!)

... Debo aclarar que tras ya varias décadas surtiendo los populares renglones de “recomendaciones” para leer, tengo cierto animo ácido al respecto de cómo lograr que el público en general encuentre ese gusto por la inmersión entre las líneas que lamentablemente se ve mutilado desde la temprana época de la escuela en donde a tanto darle con “los clásicos” la empatia por la adicción a la lectura termina siendo un franco desprecio...

No es que hoy por hoy pretenda desertar, no, ni por mi propio gusto y necesidad profesional..., pero creo que en aquello del fin justifica los medios hay un área en la que tenemos pendiente encontrar el estimulo correcto, por lo menos a nivel masivo.

... Para mi los libros son un salida de emergencia que luce siempre con brillantes rótulos, dependiendo caro de lo que deseo alimentar en mi interior. Pero como un dato interesante, puedo dejar a un lado el oficio de “lector-recomendador” y destacar más bien que dependiendo de la densidad de mi estado de animo depende si un fin de semana leo entre dos o tres libros de tamaño regular o uno de gran formato en extensión, si es una novela científica, micro historia, cuentos o ya de plano información sobre las nuevas formas de regeneración emocional...

Mencionar mi estado de animo como recurso permanente de mi necesidad –que no obligación-, de leer responde a que mirando esta campaña me preguntaba si realmente le dice algo a la gente.

Debido al formato de la campaña, no dice mucho, solo que los “famosos” también leen... y aunque no dudo que para unos cuantos sea suficiente motivación cumpliendo con las normas de impacto publicitario en realidad me brinca la neurona a grito de HÁGAME USTED EL FAVOR!, pues con la riqueza de géneros, tendencias, temas y creadores resulta poco fértil solamente indicarle a la gente que “debe” leer sin usar los recursos a la mano para mejor “disuadir”.

Si algo creo que funciona es en un par de renglones “antojar” lo que los diferentes géneros literarios – que en castellano recorren muchos caminos-, claro, con inducción a –insisto-, el animo de cada persona cuando se dispone, quiere o pretende leer un libro.

... Y justamente entre las brechas de las nuevas entregas, un texto corto que lleva a navegar en un relato romántico en cuya estructura se define un ejercicio suculento para la imaginación de reflejo realista:

Dos personajes principales enamorados y personajes secundarios atrapados, y ante ello –como en la vida real-, el oscurantismo de lo intangible.
Lo intimista de una sensualidad concreta como vinculo subjetivo donde se secuestran paisajes que el lector va llenando con su propia imagen –¿serán por ello los trozos vacíos de algunas páginas que permite una estructura seccionada para que los no aficionados a la lectura encuentren descanso y los obsesivos hagamos tramas individuales?-

La estrategia obtiene un resultado alentador: un crucigrama reconfortante donde se intercambian las letras para lograr elucubrar sobre imágenes mentales que dos escritores arropan.

En la secuencia narrativa no hay un principio ni un final lineal, no lo hay, pues al final, como en los arrebatos de pasión, cada quien resuelve que la relación termina o no;;; hay quienes deben darle fin frente a un terapeuta, hay quien se queda colgado en solitario y hay otros, muchos otros, que le dan vuelta a la página personal y creen saber que los capítulos que faltan son la provocación a inventarse un pretexto para si mismo...

De ellos, de Rivas y Traeger, los autores podría hablar en tono analítico, pero vasta con “clickearlos” para saberles el currículo así que omito esa parte y dejo colgada aquí una frase a manera de referencia, en una recomendación absolutamente viceral encontrada entre las nuevas publicaciones de nuestras letras:

- ¿Crees que por hacer tanto el amor estamos tan enamorados?
- No lo sé, quizás porque estamos enamorados es que hacemos tanto el amor.
- ¿ O será que el amor nos hace a nosotros?

CAPITULO 101, página 125
AMORES ADULTEROS
Edit. Alfaguara